Quizás una apuesta un tanto arriesgada, ya que hemos acabado todos bastante desgastados sin opción de disputar ninguna etapa y sabiendo que lo más probable era perder la vuelta ya que sabíamos las dificultades de nuestro compañero en puertos.
La etapa de ayer se complicó de salida. Después de 1h30´de coche llegamos a Lubian, un pueblo en medio del monte, frontera con Galicia. Era sin duda la etapa reina, el perfil no daba lugar a duda. De salida ya la cosa bastante tensa, un puerto de 6km. que todavía me estoy acordando del ingeniero que lo catalogo como puerto de 3a. Ya en este puerto comenzaron los ataques y arriba nos quedamos un grupo de no más de 20 corredores, en las caras ya se veía que el día prometía.
%2520041.jpg)
A partir de entonces y viendo que la cosa se complicaba con continuos ataques decidimos hacernos con el mando. El equipo completo tirando. Ya en los últimos kilómetros me quedo sólo y tiro las pocas balas que me quedan, sólo quedan 15kms. aunque los últimos 8 iban a ser una gran fiesta. Desde abajo se veían los molinos donde acabaríamos...como para no creer en dios!
El día de hoy pensábamos que iba a ser más tranquilo ya que la pérdida del liderato nos iba a dejar ir tranquilos en el pelotón pero ha sido sólo una ilusión. Toda la etapa con aire y encunetados, así que hemos llegado al sprint un grupo de unos 30 corredores, siendo al rededor de 50 los retirados en la vuelta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario